En Jalisco estrenan alcaldías sin el PAN por corrupción

Adriana Luna/ Corresponsal GUADALAJARA. El primer día del año los nuevos alcaldes de esta zona metropolitana (que comprende los municipios de Guadalajara, El Salto, Tlajomulco de Zúñiga, Tlaquepaque, Tonalá y Zapopan) —un perredista y el resto, priistas—lo empezaron trabajando. Encontraron ayuntamientos quebrados, endeudados y con nóminas obesas, por lo que ofrecieron austeridad gubernamental que se reflejará en la reducción de nóminas y salarios. Las anteriores autoridades de estos municipios eran panistas. El nuevo alcalde tapatío, Aristóteles Sandoval, insistió en que se invoca la austeridad "como medida real para abatir el derroche y fomentar las finanzas sanas". Prometió que se combatirá la corrupción y que impulsará un gobierno cercano a la gente. "La nueva figura propuesta por mi gobierno, el zar anticorrupción, tendrá como objetivo detectar y hacer del conocimiento de las autoridades los actos de funcionarios que no logren entender que en el ayuntamiento se viene a servir y no a servirse", dijo. Con un "ya volví" asumió por segunda ocasión el cargo de alcalde de Tlaquepaque, Miguel Castro Reynoso, se comprometió a bajarse el sueldo a la mitad, para percibir 25 mil pesos mensuales, y advirtió que no se pagará gasolina, automóviles o celulares a sus colaboradores. También el edil de Tlajomulco, el perredista Enrique Alfaro, prometió disminuir su sueldo y mantenerlo así durante toda su administración, sin importar la inflación. Alfaro presumió, además, que su gabinete está a prueba y que todos ya dejaron en la mesa sus renuncias. Todos los nuevos alcaldes reconocieron la importancia de una policía metropolitana moderna. En tanto, ex gobernadores jaliscienses de filiación priista recordaron a los nuevos ediles su responsabilidad. "Tienen una gran responsabilidad: la de actuar bien, porque si no, volvemos a perder. No queremos otro voto de castigo", dijo a Excélsior el ex mandatario Flavio Romero de Velasco. Con él coincidió el ex mandatario Carlos Rivera Aceves: "Que hagan las cosas en beneficio de la comunidad y del pueblo". En tanto, ayer las 38 alcaldías de Coahuila fueron renovadas al tomar protesta los nuevos presidentes municipales. En Saltillo, Jericó Abramo Masso asumió el cargo de presidente municipal tras rendir protesta en el Teatro de la Ciudad. En Torreón se llevó a cabo la instalación del cabildo, donde el alcalde, Eduardo Olmos Castro, regidores y síndicos tomaron protesta. Con información de Alma Gudiño, corresponsal Los priistas y el perredista ofrecen aplicar políticas de austeridad GUADALAJARA. El primer día del año los nuevos alcaldes de esta zona metropolitana (que comprende los municipios de Guadalajara, El Salto, Tlajomulco de Zúñiga, Tlaquepaque, Tonalá y Zapopan) —un perredista y el resto, priistas—lo empezaron trabajando. Encontraron ayuntamientos quebrados, endeudados y con nóminas obesas, por lo que ofrecieron austeridad gubernamental que se reflejará en la reducción de nóminas y salarios. Las anteriores autoridades de estos municipios eran panistas. El nuevo alcalde tapatío, Aristóteles Sandoval, insistió en que se invoca la austeridad "como medida real para abatir el derroche y fomentar las finanzas sanas". Prometió que se combatirá la corrupción y que impulsará un gobierno cercano a la gente. "La nueva figura propuesta por mi gobierno, el zar anticorrupción, tendrá como objetivo detectar y hacer del conocimiento de las autoridades los actos de funcionarios que no logren entender que en el ayuntamiento se viene a servir y no a servirse", dijo. Con un "ya volví" asumió por segunda ocasión el cargo de alcalde de Tlaquepaque, Miguel Castro Reynoso, se comprometió a bajarse el sueldo a la mitad, para percibir 25 mil pesos mensuales, y advirtió que no se pagará gasolina, automóviles o celulares a sus colaboradores. También el edil de Tlajomulco, el perredista Enrique Alfaro, prometió disminuir su sueldo y mantenerlo así durante toda su administración, sin importar la inflación. Alfaro presumió, además, que su gabinete está a prueba y que todos ya dejaron en la mesa sus renuncias. Todos los nuevos alcaldes reconocieron la importancia de una policía metropolitana moderna. En tanto, ex gobernadores jaliscienses de filiación priista recordaron a los nuevos ediles su responsabilidad. "Tienen una gran responsabilidad: la de actuar bien, porque si no, volvemos a perder. No queremos otro voto de castigo", dijo a Excélsior el ex mandatario Flavio Romero de Velasco.

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