lunes, 3 de agosto de 2015

Narco en homicidio de la Narvarte

*Autoridades pretenden hacer creer que se trató de un simple hurto

*Gobernador de Veracruz otra vez en entredicho

 

Manuel Valdéz/ Boby Delón/ Ariel Velázquez

 

En toda una tragicomedia se convirtió el multihomicidio de la colonia Narvarte, misma que ya involucró a  autoridades de diversos ámbitos, tanto local, estatal y federal, así como a diversas ONG´s, y a las Comisiones de Derechos Humanos, tanto del país como de la capital del país donde por cierto altos funcionarios siguen insistiendo que no existe crimen organizado.

Y es que el crimen contra el fotoperiodista de las agencias Proceso y Cuarto Oscuro, Rubén Manuel Espinosa Becerril, así como de su compañera de ideales, Nadia Vera, alcanzó al mismo gobernador de Veracruz, Javier Duarte de Ochoa, entidad de donde tuvieron que huir para salvaguardar por poco tiempo su vida y en donde ya establecieron su reinado diversas bandas del narco, quienes de acuerdo a diversas fuentes, están involucrados, pues tenían una red de distribución de estupefacientes en ese sitio a nivel internacional, según trascendió en la PGR, donde por cierto su titular, Arely Gómez, mandó también sus condolencias al tiempo de comprometerse a coadyuvar para resolver estos crímenes y dar con los responsables.

Con la ejecución de Espinosa Becerril, asesinado en la colonia Narvarte junto con cuatro mujeres, se elevó a 104 el número de periodistas ultimados en los últimos, así como la desaparición forzada de otros 25, solo en los últimos 15 años.

Lo peor es que estos hechos han enlutado al periodismo nacional e internacional, lo que, obviamente, genera impunidad y la multiplicación de agresiones contra trabajadores de los medios de comunicación, quienes de hecho se encuentran en estado de indefensión ante el enorme poder económico, bélico e influencias de narcotraficantes, políticos, empresarios, homicidas, tratantes de blancas y delincuentes de cuello blanco que ven afectados sus inmorales e ilegales actividades.

De acuerdo a informes obtenidos en la Procuraduría General de República en los últimos 15 años el Ministerio Público ha tomado conocimiento e iniciado averiguaciones previas relacionadas con un total de 103 homicidios de periodistas y/o trabajadores de medios de comunicación, por lo que se estima que la cifra de comunicólogos ejecutados es "muy superior", ya que como en el caso del reportero gráfico Espinosa Becerril, el asunto fue radicado en la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, lo que es un hecho ha ocurrido en otras Fiscalías y/o Procuradurías Generales de Justicia de las restantes 31 entidades federativas, en las que también el ejercicio del periodismo es "mal visto"  por las valientes denuncias que por este medio se hace de funcionarios, políticos y empresarios corruptos, prepotentes y ladrones.

De acuerdo a informes de la Subprocuraduría Jurídica y Asuntos Internacionales-Dirección General de Asuntos Jurídicos de la dependencia al mando de la maestra Arely Gómez González, la administración federal encabezada por el ahora ex presidente Felipe Calderón, --diciembre de 2006 a diciembre de 2012--  fue la "más sangrienta" por lo que hace a homicidios en agravio de comunicadores, quienes a decir de las propias autoridades policiales y ministeriales se encuentran a merced del hampa, en particular la relacionada con la delincuencia organizada.

Como ejemplo de lo anterior, las autoridades ministeriales y policiales federales acotaron que en el periodo antes citado la Representación Social inició averiguaciones previas relacionadas con los homicidios dolosos de 71 periodistas de diversos medios de comunicación, quienes se estima fueron sacrificados a consecuencia de las publicaciones que realizaron y que, sin duda alguna, afectaron intereses de empresas criminales y/o personajes de la vida política, social, financiera y del servicio público. "Es un hecho que varios de los comunicólogos fueron ejecutados por negarse a servir a los intereses de mafiosos, quienes no dudan en asesinar su ven amenazados sus negros y sucios intereses".

Conforme a documentos elaborados y difundidos por las autoridades federales, entre las que destaca la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión (FEADLE)  durante la administración del ex presidente Vicente Fox Quesada, iniciada en el año 2000, se documentaron 21 asesinatos de periodistas, cifra que comparada con la documentada durante la gestión del también panista Calderón Hinojosa, resulta "mínima", aunque no por ello menos grave. "La muerte de un solo periodista, de un comunicador, ofende y lastima a la sociedad en su conjunto, no sólo al gremio periodístico, sino a todos y cada uno de los mexicanos", acotan expertos en la materia.

Y si bien es cierto que en lo que va de la administración del presidente Enrique Peña Nieto se han documentado 11 homicidios de comunicólogos, organizaciones mexicanas de reporteros, tanto nacionales como extranjeras, hacen patente su preocupación por la pérdida de vida de reporteros, editores, redactores, corresponsales y otros "trabajadores de la tecla" y medios electrónicos, ya que ello no sólo es un atentado contra la libertad de expresión, sino una agresión y ofensa a la sociedad en general.  "No se silencia la verdad asesinando a periodistas, quienes una mil veces han refrendado su compromiso de cumplir con su sagrada y noble labor de informar a la opinión público con veracidad, aunque en ello, como ha sucedido en los últimos años, les vaya la existencia. No van a callar a los periodistas matándolos".

De acuerdo a la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra la Libertad de Expresión los estados de Chihuahua, con 16, Veracruz, con 12, Tamaulipas, con 13), Guerrero, con 11, Sinaloa, con siete, Oaxaca, con seis y Durango con cinco, ocupan los nada honrosos primeros lugares en materia de homicidios de comunicólogos. Asimismo, el sureste del país --Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán--  es la región donde se registra el mayor porcentaje asesinatos, en el periodo citado, con 36 hechos, seguido por el noroeste --Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora--  con 27.

 Por lo que hace al noreste --Coahuila, Durango, Nuevo León, San Luis Potosí, Tamaulipas y Zacatecas--  se suman 23 crímenes, en tanto que en la zona centro --Distrito Federal, Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala--  contabiliza 11 asesinatos y el zona de occidente --Aguascalientes, Colima, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nayarit y Querétaro-- registran seis periodistas ejecutados.

   

Pesquisas a fondo urgen


Para resolver este caso o más bien tratar de "maquillarlo" se tiene una testigo clave Esbeidy, quien trabaja en la SAGARPA, Hasta el momento, las autoridades tienen identificadas a Nadia Vera, activista de 32 años de edad; Nicole, colombiana de 29 años, Yesenia, estudiante originaria de Mexicali, de 18 años, y Alejandra, empleada doméstica de 40 años.

Nadia, Yesenia y Nicole residían en el departamento de la calle de Luz Saviñón, junto con Esbeidy, testigo clave de la PGJDF que no participó en la fiesta de la noche del jueves 30. La convivencia se habría prolongado hasta la mañana del viernes 31 de julio.

Conforme a autoridades, los agresores huyeron de la escena del crimen a bordo de un Mustang Shelby 2006, propiedad de Nicole. La PGJDF espera más información sobre material videográfico, pues en la calle donde se localiza la vivienda están colocadas al menos 5 cámaras de seguridad.

Y es que en ese departamento de tres habitaciones vivía junto con Yesenia Atziri Quiroz Alfaro, joven maquillista de Baja Californía; Nadia Dominique Vera Pérez, promotora de arte chiapaneca y Esbeidy, trabajadora de la Sagarpa. De acuerdo con los informes, la noche del jueves Esbeidy (cuyos apellidos se omiten por seguridad) llegó de trabajar y vio a Nicole, Yesenia y Nadia conviviendo junto con cuatro hombres, entre ellos el fotoperiodista Rubén Espinosa. Estaban bebiendo alcohol.

La mañana del viernes, esta joven volvió a verlos antes de salir a trabajar. A decir de los testigos, alrededor de las 10:00 horas llegó al departamento la señora Alejandra, quien ayudaba con las labores domésticas.

Las autoridades que aún reconstruyen cómo sucedieron los hechos con exactitud, por ahora saben que las cerraduras no fueron forzadas y que entre las 12:00 y las 15:00 horas, los hombres atacaron a las tres jóvenes, a la empleada doméstica y al fotógrafo. Los ataron de pies y manos y los encerraron en las recámaras.

Nicole y Yesenia fueron torturadas y quedaron juntas en una habitación. Nadia y Rubén golpeados y torturados en otra. A la señora Alejandra la dejaron en el baño. A todos les dispararon en la cabeza.

 

      Capturar a los responsables: Mancera


El jefe de Gobierno del DF, Miguel Ángel Mancera, informó que en el caso de los asesinatos en la colonia Narvarte dio instrucciones precisas al procurador capitalino para que se investigue este homicidio y se dé con los responsables.

 "He dado instrucciones precisas al procurador para que no se escatimen los esfuerzos a fin de dar con los responsables de este homicidio. En este sentido estaremos muy atentos primero a que no haya impunidad, cuando se comete un crimen como éste en la ciudad lo primero que tenemos que dar es garantía para resarcir a las víctimas, que no haya impunidad, dar con los responsables sea quien fuera", señaló.

En tanto, la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Angélica de la Peña, exigió el esclarecimiento de los asesinatos del fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril y de Nadia Vera, Yesenia Quiroz y otras dos mujeres, ocurrido el viernes pasado en la colonia Narvarte de la Ciudad de México.

"Desde el Congreso de la Unión exigimos que las autoridades del Distrito Federal, del Estado de Veracruz y del gobierno Federal, esclarezcan de manera pronta, eficaz y transparente, estos actos de barbarie", demandó la senadora del PRD.

De la Peña adelantó que presentará un punto de acuerdo para exigir el esclarecimiento del caso, en el que también solicitará un informe pormenorizado de las acciones para garantizar la vida e integridad de Espinosa Becerril por parte de la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas de Veracruz y del Mecanismo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de Gobernación.

En ese departamento de tres habitaciones vivía junto con Yesenia Atziri Quiroz Alfaro, joven maquillista de Baja Californía; Nadia Dominique Vera Pérez, promotora de arte chiapaneca y Esbeidy, trabajadora de la Sagarpa. De acuerdo con los informes, la noche del jueves Esbeidy (cuyos apellidos se omiten por seguridad) llegó de trabajar y vio a Nicole, Yesenia y Nadia conviviendo junto con cuatro hombres, entre ellos el fotoperiodista Rubén Espinosa.

Las autoridades que aún reconstruyen cómo sucedieron los hechos con exactitud, por ahora saben que las cerraduras no fueron forzadas y que entre las 12:00 y las 15:00 horas, los hombres atacaron a las tres jóvenes, a la empleada doméstica y al fotógrafo. Los ataron de pies y manos y los encerraron en las recámaras.

Nicole y Yesenia fueron torturadas y quedaron juntas en una habitación. Nadia y Rubén golpeados y torturados en otra. A la señora Alejandra la dejaron en el baño. A todos les dispararon en la cabeza.

En el lugar fue hallada una almohada con sangre, por lo que las autoridades suponen que los homicidas la usaron para minimizar el ruido del arma. Y es que los vecinos de los otros nueve departamentos que hay en ese edificio aseguraron no haber escuchado ningún balazo.

A decir de un vecino, entre las 15:00 y las 15:30 horas vio salir del edificio a tres hombres. Abrieron el Mustang de Nicole, guardaron una maleta y se fueron en él. Por la noche regresó a la casa Esbeidy. Entonces halló muertas a sus tres amigas, a Rubén y a la señora de la limpieza. Los homicidas habían desaparecido.

 

Investigan todas las líneas de investigación: PGJDF


La Procuraduría General de Justicia del DF agotará y seguirá todas las líneas de investigación en torno al homicidio de cuatro mujeres y el fotoperiodista Rubén Espinosa, asesinados el viernes pasado alrededor del mediodía en un departamento de la colonia Narvarte.

El procurador Rodolfo Ríos aseguró ayer que el robo en el lugar, y una serie de amenazas que recibió Rubén Espinosa en Veracruz, forman parte de las indagatorias que trabajan.

"Se quedan abiertas todas las líneas de investigación, la Procuraduría capitalina por supuesto que está enterada del tema, por supuesto que tiene la sensibilidad de agotar todas las líneas que nos lleve al esclarecimiento de los hechos, incluyendo los datos que tenemos respecto a la entidad de Veracruz en donde desarrollaba la actividad", dijo en conferencia de prensa.

Antes de hablar sobre el tema, Ríos Garza y la secretaria de Gobierno, Patricia Mercado, se reunieron con familiares de las víctimas y con integrantes de los medios de información para los que trabajó el fotógrafo.

Estuvo con representantes de la revista Proceso, Periodistas de a Pie, la agencia Cuartoscuro y la Organización Artículo 19. En la reunión incluso participó el director de la agencia fotográfica, Pedro Valtierra, con quien laboró Espinosa.

Ante ellos, el procurador se comprometió a agotar todas las líneas de investigación para dar con los responsables del crimen; además los mantendrá al tanto y hablará con ellos sobre los avances.

 

  Habla la CNDH

 

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) debe esclarecer en breve el homicidio del periodista Rubén Espinosa y cuatro personas más, exigió el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) , Luis Raúl González Pérez.

Entrevistado luego de inaugurar el Conversatorio con motivo del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, el ombudsman condenó este hecho y señaló la importancia de que no quede impune.

"Toda agresión contra comunicadores y medio de comunicación debe entenderse como un intento por impedir la libertad de expresión y debe condenarse de manera enérgica", sostuvo.

Exigimos que se llegue rápidamente a las conclusiones y se detenga a los culpables en el caso de Rubén Espinosa y también en la agresión a las instalaciones del diario "Presente" en Poza Rica, Veracruz, reiteró González Pérez.

Aseguró que el mecanismo de protección para defensores de derechos humanos y periodistas que emana de la ley en la materia todavía es perfectible y esta es una oportunidad que demuestra que debe funcionar mejor.

Reconoció que la ley correspondiente es un punto de partida importante, si bien se necesita cerrar la brecha entre la normatividad y la operatividad de la norma.

 

Sin embargo el ombudsman nacional reconoció que es necesario fortalecer las normas y hacer que funcionen al tiempo de reiterar su exigencia de que las autoridades esclarezcan estos hechos para que no queden impunes.

Además ofreció el acompañamiento de la comisión a su cargo para los comunicadores a través de las medidas de protección para evitar nuevos hechos como los que lamentablemente ocurrieron en las últimas 72 horas tanto en el Distrito Federal como en Veracruz.

La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) informó que aún espera el resultado de las necropsias que se efectúan a los cinco cuerpos hallados sin vida la noche de ayer en un departamento situado en calles de la colonia Narvarte, delegación Benito Juárez; estos procedimientos ayudarán a determinar las causas de muerte.

Con la finalidad de esclarecer los hechos, la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) inició la averiguación previa correspondiente por el delito de homicidio.

A través de un comunicado, la dependencia informó que los cuerpos de las víctimas corresponden a cuatro mujeres  y a un hombre, quienes en las próximas horas serán identificados.


Se trató de un multinarco crimen


La antropóloga Nadia Vera Pérez, de 32 años, de acuerdo a diversas fuentes, tenía un diagnóstico preciso de la crisis de violencia e impunidad que sufre Veracruz, el estado donde había estudiado la universidad y donde vivía aunque era originaria de Comitán, Chiapas. "Aquí la mercancía eres tú", le dijo a los autores del reportaje "Veracruz: la fosa olvidada", elaborado y estrenado en noviembre de 2014 por la organización de televisión por internet Rompeviento para documentar las desapariciones en aquella entidad.

"A ti te agarran como mujer para la trata, a ti como estudiante para el sicariato. Aquí el problema somos todos nosotros, que les estorbamos tanto al Gobierno como al narco; estamos ante dos frentes de represión, ilegal y la legal. Porque el narco es el que gobierna en este estado. El narco es el que está rigiendo; Los Zetas literalmente son los que tienen todo este estado manipulado, regido; aquí te cobran derecho de piso, aquí te cobran por tener un bar, te cobran por trabajar", dijo la joven egresada de la Universidad Veracruzana y, hasta su muerte, promotora cultural.

Cabe resaltar que el fotorreportero Rubén Espinosa Becerril planeaba dejar el departamento ubicado en el número 1909 de la calle Luz Saviñón poco después de las dos de la tarde del pasado viernes 31 de julio, y así se lo escribió a uno de sus amigos que, a las 14 horas con 13 minutos, recibió un mensaje de texto del periodista diciendo: "Voy de salida a la calle".

Al menos unas nueve cámaras de seguridad ubicadas en esa cuadra debieron registrar lo que ocurrió a partir de entonces y hasta las nueve de la noche, cuando una mujer, al parecer amiga de las víctimas, subió al cuarto piso, abrió la puerta del departamento 401 y encontró la escena del crimen múltiple en que fueron torturados y asesinados Espinosa –de 31 años, refugiado en esta ciudad por amenazas en Veracruz- y otras cuatro mujeres. Una de ellas, de acuerdo con RompevientoTV, es la antropóloga egresada de la Universidad Veracruzana, Nadia Vera, de 32 años, residente de Xalapa y, como el periodista, conocida por su trabajo de denuncia sobre la ola de violencia e impunidad que prevalece en el Gobierno de Javier Duarte de Ochoa.

Asimismo, las fuentes señalaron que el fotoperiodista Rubén Espinosa Becerril, de 31 años y colaborador desde Veracruz para la revista Proceso y la agencia Cuartoscuro, temía por su vida desde al menos 2013. En octubre de ese año, y luego de que él y otros reporteros de Xalapa fueron agredidos por policías estatales cuando cubrían el desalojo de un plantón de maestros y alumnos de la Universidad Veracruzana, viajó ex profeso a esta capital para denunciar la situación ante colegas locales.

Su testimonio generó la creación del colectivo FotorreporterosMx, que aglutinó a decenas de comunicadores que, en solidaridad con lo narrado por Espinosa, realizaron una protesta vendándose los ojos afuera de la representación del gobierno de Veracruz en esta ciudad. También por la presión ejercida por Espinosa y sus colegas agredidos, en Xalapa se formó además una Comisión Legislativa para la Atención Protección de Periodistas.

Participaba también de manera activa en los actos de conmemoración y exigencia de la justicia por el asesinato de la periodista Regina Martínez, corresponsal de la revista Proceso en aquella entidad y asesinada en 2012.

Espinosa se había convertido, como dijo él mismo a SinEmbargo en una entrevista del pasado 1 de julio, en "un periodista incómodo" para el Gobernador Duarte, campeón, con 14 homicidios de periodistas, de la brutalidad contra la prensa en México.


    Aparecen  narcomanta 


En un puente peatonal de la carretera Picacho-Ajusco volvió a aparecer una "narcomanta" adjudicada a los cárteles de Sinaloa y Nueva Generación, y en donde advierten a todas las autoridades capitalinas que "vamos a recuperar la plaza":

Policía de Investigación indicaron que ya hubo reuniones con personal de la Coordinación Territorial Tlalpan Uno para analizar la situación, Los agentes señalaron que incluso sus comandantes les dieron la indicación de tener cuidado.

 Y siempre permanecer acompañados de otros oficiales, Vecinos de la zona denunciaron la colocación de la manta. Según una ciudadana que fotografió el letrero, la manta estaba firmada por el cártel de Sinaloa y el cártel Nueva Generación.

 Las palabras no alcanzan a distinguirse en la imagen, pero de acuerdo con quien tomó la foto, contenía un mensaje para el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, a quien advertían que iban a recuperar la plaza y amenazaban con empezar una lucha por el territorio.

 Desde finales del año pasado, corporaciones de seguridad del DF, además de la Policía Federal y el Ejército vigilan El Ajusco, luego de que se presentaran hechos violentos en la zona y la operación de organizaciones delictivas.

 Además, las autoridades localizaron hace unas semanas un narcolaboratorio en la parte alta de esa zona boscosa.