miércoles, 24 de octubre de 2007

(INPC) Inflación general en primera quincena de octubre 0.32%


Inflación general en primera quincena de octubre 0.32%
Lino Javier Calderón
Las cifras de la variación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de la primera quincena de octubre estuvieron lejos de despejarnos las dudas sobre el futuro inmediato de la tasa diaria de fondeo.
De acuerdo con el Banco de México (Banxico), la inflación general aumentó en 0.32%, en las primeras dos semanas de octubre, mientras la inflación subyacente lo hizo en 0.21%. El primer dato resultó prácticamente igual al consenso que esperaba un incremento de 0.33%, sin embargo la inflación subyacente se anticipaba de 0.14%, por lo que sembró algunas dudas y dejó toda incertidumbre.
El banco Central indica que en primera instancia la trayectoria de la inflación subyacente acarrea una tendencia claramente al alza desde enero de 2006. Si bien esta tendencia ha sido monótona creciente de forma marginal, a partir de la primera quincena de septiembre la inflación subyacente no descendió a tasa anual en la misma magnitud que la inflación general. Lo anterior sugiere que es la inflación no subyacente la que ha mantenido "a raya" a la general, mientras que la subyacente siguem mostrando presiones.
De esta forma, con la cifra quincenal de octubre, la inflación subyacente, 0.21%, es las más alta para una primera quincena de octubre desde 1999, año en que registró una variación de 0.39%.
Y es que en el interior de la inflación subyacente, encontramos que el subíndice de mercancías no deja de presionar y no es compensado por el subíndice de servicios.
Los subíndices de las mercancías y de los servicios que integran a este indicador se situaron en 0.31% y 0.10% por ciento, respectivamente (en las mismas quincenas de 2006 estas variaciones fueron 0.18 y 0.08 por ciento).
De acuerdo con Banxico, los aumentos que se observaron en las cotizaciones de la leche pasteurizada y de los cigarrillos contribuyeron en 56 por ciento de la diferencia entre las tasas de variación del indicador subyacente de la primera quincena de octubre de 2007 con relación a la del mismo periodo del año previo.
Las tasas anuales dejan ver con mayor claridad esta presión. La tasa anual del componente de mercancías se ubicó en 4.46%, la segunda más alta del año después del 4.48% de la segunda quincena de agosto, y la segunda más alta desde la segunda quincena de octubre de 2001 cuando fue de 4.58%.
Hay más, en los alimentos procesados se tuvo una variación anual de 7.48%, la más alta en 7 años, cuando en la primera quincena de septiembre de 2000, fue de 7.73%. Y para rematar, la leche pasteurizada alcanzó una tasa anual de variación de 13.39%, la tasa más alta desde que el Banco de México tiene registro de estos índices (enero de 2002).
Por lo tanto, el dato de inflación de la primera quincena de octubre no fue muy alentador. De hecho Banxico informó que la suspensión temporal que se decretó a las alzas en los precios de la gasolina Magna, gas licuado y tarifas eléctricas contribuyó a limitar el incremento de la inflación en esta quincena. Es decir, de no haberse aplazado para el siguiente año, ambas, tanto general como subyacente abrían sido mayores al consenso (esta noticia únicamente impactaría a la inflación general, ya que en la subyacente no están incluidos estos bienes energéticos).
Todavía la base de comparación juega un papel importante para que el banco central pueda dejar la tasa de fondeo sin cambios este viernes, pues se espera que la inflación general termine el año en 3.78% y la subyacente en 3.8%.
Adicionalmente, las probabilidades apuntan a que la Reserva Federal (Fed) baje su tasa de referencia la próxima semana, por lo menos en 25 puntos base. Otro argumento sería que las presiones sobre la inflación derivan de un porcentaje limitado de bienes, es decir, que no es generalizada y que el choque es temporal.Sin embargo, estos motivos aún no disipan la polaridad que hay en los mercados domésticos sobre el futuro del fondeo este viernes. En casi más de un año, no había tanta incertidumbre al grado de estar 50-50 en la variación de la tasa diaria de referencia mexicana.