viernes, 12 de octubre de 2012

Asesino de dama sentenciado a 24 años de prisión

En una resolución calificada como "menor" por juristas debido a la gravedad de los hechos, autoridades del juzgado Sexagésimo Penal del fuero común, con base en pruebas aportadas por la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, sentenciaron a 24 años de prisión a delincuente que privó de la existencia a una mujer en el perímetro de Tláhuac, no obstante que ésta le entregó dinero en efectivo, alhajas, objetos de valor y las llaves de su automóvil para que no le dañaran. Los hechos se registraron frente al hijo menos de la víctima, una cumplida y eficiente trabajadora.
Autoridades de la dependencia al mando del procurador Jesús Rodríguez Almeida fueron notificadas por personal de la Secretaría de Acuerdos del citado órgano jurisdiccional que se habían encontrado elementos suficientes para imponer a David Antonio Rodríguez  Cureño una sanción privativa de libertad de 24 años por el homicidio joven mujer, a quien ultimo a balazos a pesar de que ya le había despojado de sus pertenencias y vehículo. Consta en autos que el 15 de octubre de 2007 la infortunada víctima, sin imaginar lo que le iba a suceder horas después, salió de su trabajo para abordar, junto con su menor hijo, su automóvil y dirigirse a su domicilio particular, localizado en la Unidad habitacional Villa de los Trabajadores, perímetro de Tláhuac, donde luego de comer ayudaría en sus tareas a su vástago. Sin embargo y luego de llegar a su destino y descender del vehículo, la infortunada mujer fue sorprendida por David Antonio y dos individuos más, quienes a gritos, majaderías y golpes la obligaron a entregarles dinero, joyas y todo objeto de valor que llevaba, además de quitarle las llaves del automotor.
"No obstante que la indefensa mujer no opuso resistencia ni llamó la atención para ser auxiliada, los delincuentes la agredieron y subieron al vehículo, desde el cual Rodríguez Cureño disparó contra la atribulada madre, quien perdió la existencia en el lugar de los hechos, todo ello frente a su pequeño hijo.
No tenía caso que el malviviente accionara el arma de fuego contra la mujer, ya que la había despojado de todo lo de valor. Es injusto, aunque apegado a derecho, que a un tipo de tal calaña solo se le impongan 24 años de prisión y una sanción pecuniaria que no llega siquiera a los 40 mil pesos por concepto de indemnización y gastos funerarios, por lo que el Ministerio Público debe apelar la sentencia y la misma aumentada por las autoridades correspondientes, ya que se trata de un crimen a sangre fría, con todas las agravantes de la ley y sobre todo frente al hijo de la afectada.