Nadia Hernandez Soto
MEXICO.-Tal parece que el nuevo Reglamento de Gas LP no logró unificar al gremio distribuidor para que éste lograra mantener precios competitivos para el consumidor.
Y es que la Secretaría de Energía, que lleva Georgina Kessel, sólo pensó en publicar un documento cuyo resultado será el incremento de los costos de operación de las empresas distribuidoras, efecto que sin duda se notará en los bolsillos del usuario.
Con la nueva reglamentación las empresas que distribuyen el gas a través cilindros portátiles sólo recibirán un 2 por ciento de los recipientes que no sean de su marca, además se estableció la obligación de intercambiar recipientes entre empresas competidoras, pagando en efectivo las diferencias del número de cilindros entre las compañías.
Lo anterior incrementará costos del 50 por ciento del valor de los recipientes, que a lo largo de un año puede representar millones de pesos en pérdidas para distribuidoras, mismas que buscarán costear este gasto elevando el precio del gas hacia el consumidor.
Por esta circunstancia las compañías se ampararán, buscando que sea la autoridad competente, es decir, un juez, quien defina si es o no admisible el proceder en dicha regulación que acarreará un gasto importante que además tiende a proteger las participaciones de mercado de las grandes empresas distribuidoras.
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