jueves, 17 de diciembre de 2020

En la mira irregularidades en juegos y sorteos bajo gestión Alma Itzel De Lira Castillo

En la mira irregularidades en juegos y sorteos 
bajo gestión Alma Itzel De Lira Castillo
Redacción 

Bajo la lupa se encuentra la gestión de Alma Itzel De Lira Castillo, quien apenas lleva tres meses como titular de la Dirección General de Juegos y Sorteos y ya se detectaron algunas irregularidades.
El martes 15 de diciembre, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, dijo durante un evento que en últimas fechas detectaron la existencia de diversos permisos o autorizaciones de juegos y sorteos que son apócrifos. 
La alerta se prendió en Juegos y Sorteos ante posibles actos de corrupción y la probable falsificación de documentos para la tramitación y autorización de permisos.
Durante la gestión de Luis Calvo Reyes al frente de la Dirección General de Juegos y Sorteos, en ese entonces dependiente de la Subsecretaría de Gobierno encabezada por Ricardo Peralta Saucedo, clausuraron 25 casinos por presentar algunas irregularidades.
Los cierres de los centros de apuestas fueron en los estados de Sonora, Tamaulipas, San Luis Potosí, Quintana Roo, Ciudad de México, Nuevo León y Jalisco. Además, se destaca que en ese periodo no se otorgó ningún permiso para la apertura de nuevos casinos. 
Con la salida por motivos personales de Luis Calvo, el 16 de septiembre de 2020 asumió el cargo Alma Itzel De Lira Castillo, quien habría dejado de dar continuidad al trabajo anterior enfocado en combatir la corrupción en esa área.
Y es que en los tres meses que lleva la actual titular de Juegos y Sorteos, se detectó la circulación de un documento apócrifo que va membretado y con los datos se simulan haber sido emitido a través de esa dirección.
Al tratarse de falsificación de documentos oficiales, el caso tendría que llegar a la Fiscalía General de la República para iniciar una carpeta de investigación y deslindar responsabilidades.
Cabe señalar que existe la tecnología para hacer documentos apócrifos que prácticamente son difíciles de detectar su autenticidad; son tan parecidos a los originales que los propios peritos tienen que hacerse de información de las instituciones públicas de todos los órdenes de gobierno para rectificar o ratificar la autenticidad o no de los mismos.